Vacío y estridente
suena
el silencio
chirriando
reverberando lamentos y desesperación
en forma de pensamientos en busca de explicaciones
agolpados en mi sien
aplastándome el estima
nerviosos e inquietos por el sepulcral silencio de mi alrededor
de mi cuerpo
por el silencio de mi expresión
ni el temblor resulta armonioso
ni la quietud relajante
no alcanzo a explicar porqué estoy así
cómo he llegado aquí
ni porqué este silencio resulta tan incómodo
y a la vez tan familiar
mientras tanto
me desvanezco en su envolvente ausencia
pero no quiero sentarme a ver como me desintegro
con mi propio instinto autodestructivo
y sin embargo
no puedo evitarlo
y aquí estoy
saboreando mis minutos de pena sin gloria
ya cotidianos
y bañados en el azúcar de la familiaridad
guardando en cajitas con cuidado los restos
para rememorarlos en momentos más luminosos
desconocidos e imprevisibles
indignos de confianza
y así seguir bañándome
en mi mar
de pena sin gloria
como siempre
de manera inevitable
y así sentirme cómodo
en mi almohada de desastres y fatalismo
con asiento en primera fila
para verme desaparecer
poquito a poco.
4 comentarios:
No desaparezcas ni te diluyas, sobre todo mientras sigas escribiendo cosas como esta.
A veces es inevitable diluirse y sólo cabe esperar que el vaso no contenga suficiente agua, y así poder saturarla.
Me alegra que te haya gustado
pues sí, creo que es lo que más me ha gustado de todo lo que te he leído, en serio.
hola frozen, paso a dejarte un bico enorme desde vigo y a darte las gracias por haber sido parte de mi 2007, espero que en 2008 seas más feliz que nunca!!!!
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